La Red de Sobrevivientes Perú, cuyo objetivo es luchar contra la violencia física, psicológica, espiritual y sexual en entornos eclesiales, manifiesta su rechazo a la presencia en las actividades previas al cónclave del cardenal peruano Juan Luis Cipriani Thorne, quien ha desobedecido una vez más al precepto penal que le impuso en vida el papa Francisco. Al acudir a las congregaciones generales o reuniones preparatorias del cónclave, Cipriani y los cardenales que se lo permiten revictimizan a la víctima denunciante, lo cual es imperdonable. Si la Iglesia católica quiere seguir en el sendero de tolerancia cero a la violencia sexual contra menores planteada por el papa Francisco, ello es un preocupante mensaje que afecta la confianza en los criterios de elección del próximo pontífice.
Sin mostrar ningún arrepentimiento ni una mínima empatía con la víctima, el cardenal Cipriani prueba con esta actitud que tiene el perfil de un agresor sexual, ya que es sabido que los perpetradores de estos delitos los cometen llevados por un impulso descontrolado de ejercer poder sobre sus víctimas y la presencia de Cipriani tiene como finalidad lo mismo: una muestra pública de rebeldía y poder.
Además, este gravísimo hecho contradice abiertamente lo indicado por el papa Francisco al presidente de la Red de Sobrevivientes de Perú, Jose Enrique Escardó Steck (JEES), en la audiencia privada del 24 de enero, donde conversaron sobre las señales que debe dar la Iglesia a partir del ejemplo de la supresión del Sodalicio de Vida Cristiana.
Esperamos que el Colegio Cardenalicio tome una decisión inmediata y dé muestras de lo que esperamos todas las víctimas y sobrevivientes de violencia eclesial para el futuro de la Iglesia.
Lima, 29 de abril de 2025